El gerente de la Fundación Gypaetus informa de que las cinco últimas aves liberadas el año pasado están «perfectamente».
La decisión tomada por la Fundación Gypaetus para no realizar este verano ninguna suelta de ejemplares de quebrantahuesos en el medio natural, con el fin de «reajustar la lucha contra el veneno», toda vez que hace poco aparecieron en la sierra de Castril los cadáveres de dos muertos por envenenamiento, «no frena el programa de reintroducción de esta especie» y, además, amplía el «stock cautivo».
De esta manera, según el gerente de la fundación, Jesús Charco, ha explicado a Europa Press, la decisión de no soltar este verano «ni mucho menos frena los trabajos del proyecto, que sigue realizándose con intensidad en todos los frentes». El programa continua su evolución normal y el Centro de Cría de Quebrantahuesos, situado en el Parque Natural de Cazorla, Segura y las Villas de Jaén, funciona «muy bien», convirtiéndose en el principal del mundo en este ámbito.
Además, ha señalado que el centro temático ha visto aumentado sus visitas en los últimos años y recuerda que el objetivo para este 2011 es alcanzar la cifra de 20.000 asistencias al mismo. Por otro lado, ha explicado que el seguimiento en el campo de las diez aves que vuelan son continuos, así como ha resaltado la evolución del proyecto de educación ambiental, las reuniones en colegios y centros educativos, y con agentes involucrados en la reintroducción como ganaderos y agricultores.
El Centro de Cría jiennense, enmarcado en el Programa de Reintroducción del Quebrantahuesos de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, actualmente cuenta con siete parejas reproductoras. Además, gracias al intercambio de ejemplares con los otros centros del programa, Valcallent (Lleida) y el Richard Faust Zentrum de Viena (Austria), Andalucía cuenta «siempre de seis a ocho ejemplares más».
En este sentido, Charco ha afirmado que estas siete parejas reproductoras estables presentan «resultados tan estupendo como los de la última temporada», cuando nacieron nuevo pollos, lo que eleva a eleva hasta 27 los pollos que han salido adelante en este centro desde que la Junta de Andalucía pusiera en marcha estas instalaciones en 1996.
Las noticias generadas por la actividad del centro durante este año son positivas, salvo la confirmación de la muerte de dos quebrantahuesos el pasado mes de mayo. «El programa está siendo muy positivo», asegura Charco.
CUESTIONES MORALES Y TÉCNICAS
El gerente ha aclarado que la decisión de no realizar sueltas de quebrantahuesos este verano está vinculada a dos cuestiones. Por un lado, según explica, a una cuestión «moral», ya que el hecho de que se siga usando veneno, aunque precisa que «ya es poco», y las consecuentes muertes de aves en la zona de Castril, «moralmente seguir soltando aves cuando sabemos que no se ha acabado con el veneno al cien por cien, no es correcto».
En este sentido, ha confirmado que mantienen reuniones periódicas con el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil, con ganaderos, Agentes de Medio Ambiente, Junta, agricultores y cazadores «para acabar con esto; y será entonces cuando se seguirán soltando aves». «Las muertes de los últimos quebrantahuesos nos ha hecho dar un golpe en la mesa y decir basta ya porque no se puede seguir así de ninguna manera», lamenta.
Por otro lado, el aspecto técnico-científico de la decisión de no soltar, aunque a priori parezca un pequeño parón en el programa de reintroducción, es que las aves seis que se iban a liberar aumentan el «stock cautivo del programa europeo», esto es, son tres parejas más para criar, por lo que «en años venideros en lugar de soltar cinco o seis aves al años, se podrán liberar ocho o nueves».
Asimismo, reitera que esta decisión «no supone grandes cambios en el programa global, e incluso puede suponer una pequeña mejoría, aunque no se ha tomado la misma por ese hecho».
Charco, que ha indicado que la dimisión de Fernando Hiraldo como presidente de la Fundación Gypaetus era normal, pues llevaba tiempo que había manifestado su intención de abandonar el cargo, ha informado a Europa Press de que las cinco últimas aves liberadas en las zonas de Cazorla, Segura y Las Villas y en Castril, en mayo y junio del año pasado, están «perfectamente» tras el frío del invierno y la primavera.
Fuente: europapress.es